Erika le pide a Nagi que la lleve de compras, pero él se niega, alegando que tiene planes. Invita a Hiro a estudiar para compensar el hecho de avergonzarse en el parque de atracciones. Como la biblioteca pública tiene una política de no hablar, se ven obligados a comunicarse mediante notas, aunque esto termina siendo más íntimo. Hiro invita a Nagi a un gimnasio de kickboxing.