Molestos fantasmas causan problemas para las chicas en la mansión, por lo que deben convocar a un doctor brujo para limpiar la casa de espíritus malignos. El doctor brujo sospecha que las Halliwell no son verdaderamente buenas y roba algunos objetos personales con el objetivo de realizar embrujos sobre las chicas para destruir a las Encantadas. Mientras, el mundo de Paige se derrumba al enterarse que su alguna vez novio, Glen, está por casarse. Y Phoebe descubre que una columnista rival no sólo está robándole lectores sino que también está desatando una serie de actos personales en su contra.