Yūichi se escapa constantemente por la noche y, para acabar con su hábito, su enfermera Akiko bloquea su puerta para evitar que se vaya. Sin embargo, ella llega a un acuerdo de que si él puede hacerse amigo de un nuevo paciente, ella levantará su restricción. La nueva paciente resulta ser Rika, una chica de diecisiete años del pabellón este que disfruta leyendo las obras de Ryūnosuke Akutagawa. Al principio, Yūichi, con la ayuda de Akiko, miente acerca de leer el mismo libro, pero Rika se da cuenta fácilmente de este acto y exige que, a cambio de su perdón, él debe hacer lo que ella quiere.