La convivencia de los habitantes de la casa de Ava comienza a dar los primeros problemas. Nikki, parece no aceptar que en su nuevo hogar, Susana juegue un papel destacado y rechaza la propuesta de viajar con ellas a una presentación con una importante diseñadora de moda. Finalmente, Susana asiste sola al encuentro que resultará ser un fracaso, por lo que la amiga de Ava se siente molesta con la sobrina de ésta. Bradin pide consejo a Johnny y Jay sobre si debe o no declarar su amor a Erika, su monitora de surf. La joven, que sufrió mucho con una antigua relación, decide dar una oportunidad a su alumno. Finalmente, Bradin y Erika quedan para ir juntos a un concierto. Ella le esperaría en una cafetería, pero cuando el joven llega al lugar del encuentro, ve como su pareja está besándose con Jay.