Lleó le hace compañía a Benito, que le cuenta que, cuando era un muchacho, formó un grupo con sus hermanos semejante a los "Pulseras Rojas". Pero la muerte de la madre lo cambió todo. Debido a esto, Benito se había ido de casa abandonando a su padre y a sus hermanos, algo de lo que se ha arrepentido toda la vida. Benito empeora y lo trasladan a otra sala, a la espera de un desenlace inminente. Benito le pide a Lleó que vuelva a juntar a los "Pulseras" y que busque el único hermano suyo que aún está vivo y le pida perdón. Lleó le promete que lo hará.