Gibbs se enfrenta al asesinato de dos mujeres, ambas esposas de infantes de Marina. Los resultados de la investigación determinan que el móvil de los crímenes podría ser racial. Según las pruebas, otra joven y su bebé podrían estar ahora en el punto de mira del criminal, al que el equipo deberá dar caza antes de que sea demasiado tarde.