Un teniente de la Marina aparece muerto tras haber manipulado un robot llamado Otto en el marco de una operación de alto nivel. En principio, el equipo de NCIS baraja las hipótesis del suicidio y del asesinato. Sin embargo, cuando Abby está a punto de morir, Gibbs descubre que el vehículo funciona de manera incorrecta y, por lo tanto, podría tratarse de un crimen. Mientras, Ziva se pregunta el motivo de las visitas al hospital de Tony.