Beatrice está ganando notoriedad, pero no la que ella desea: los ladrones que entraron en casa de Edison han hecho para el pública la película de sexo de Beatrice. Beatrice no sabe por qué debería ser vilipendiada, especialmente porque fue secuestrada y engañada para hacer la película. Pero cuando ella y Dodo se enteran de que otros están ganando dinero con la película, creen que también deberían poder sacar provecho de ella. Lillian, por otro lado, está celosa de la nueva fama de Beatrice.