Los padres, Jack y Jennie Mallory, se divorcian en los primeros episodios. Tienen tres hijos: Ryan, el mayor, rivaliza con su padre en estupidez; Tiffany es tan inteligente como guapa (de dónde sacó la inteligencia nadie lo sabe), y Ross, es el pequeño. Mister Floppy, el conejo de peluche que vive en el sótano, comenta con sorna las peripecias de la familia.