Ashka lo está pasando mal en el mundo de Paul. Ella usa el traje de poder en una tienda de electricidad y todos los electrodomésticos se vuelven locos. Paul ve un informe sobre el evento y se da cuenta de que debe haber un Spellbinder en su mundo: Ashka. En la escuela, Katrina encuentra a Paul y Alex en el laboratorio de ciencias, construyendo dos detectores electromagnéticos. Ella sospecha lo que están haciendo, pero lo niegan. Decide buscar por su cuenta. Katrina visita la tienda de electricidad donde Ashka usó su traje de poder y sigue las señales magnéticas que Ashka ha dejado.