Frasier está entusiasmado ante la perspectiva de ir al Caribe con Claire, su última conquista. Lo malo es que la romántica escapada se convierte en excursión familiar cuando Martin, Daphne y Niles se apuntan al mismo viaje. Una vez allí, Frasier tiene la impresión de que todo se ha vuelto en contra suya para impedirle disfrutar plenamente de tan maravilloso lugar.